Por: Margarita María Peláez Mejía
“Un derecho no es lo que alguien te debe dar.
Un derecho es lo que nadie te debe quitar”.
En este día, en el marco de la conmemoración del 8 de marzo Día Internacional por los Derechos de las Mujeres, hacemos reconocimiento con la Medalla al Mérito Femenino Débora Arango Pérez a las mujeres que con liderazgo, empoderamiento, creatividad y conciencia de sus derechos, se convierten en modelos a seguir para las futuras generaciones.
Saludo al Alcalde, a las Secretarías de Equidad de Género para las Mujeres del Departamento de Antioquia y el municipio de Itagüí, la Alcaldía de Medellín, al gabinete municipal, al jurado, a las personas y organizaciones presentes que trabajan por los derechos humanos de las mujeres y por la equidad e igualdad de género.
Desde principios del siglo XX las organizaciones femeninas lucharon por visibilizar este día por los derechos de las mujeres.
Un 8 de marzo en 1908, 15.000 obreras marcharon en Nueva York solicitando una jornada laboral de 8 horas y mejores salarios, al grito de “Pan y rosas”.
1910- La Internacional Socialista, reunida en Copenhagen, proclamó el día internacional por los derechos de las mujeres, liderada por Clara Setkin.
1911- Se celebró por primera vez el día de las mujeres (el día 19 de marzo) en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza, reivindicaban el derecho al voto, al trabajo, a ocupar cargos públicos, a la no discriminación.
En este mismo año, el 25 de marzo más de 140 mujeres trabajadoras, la mayoría inmigrantes italianas en estados unidos, murieron en el trágico incendio en la ciudad de Nueva York.
1913-1914- En el marco de los movimientos pacifistas, en vísperas de la primera guerra mundial, las militantes Clara Setkin y Rosa Luxemburgo llaman a jornadas para protestar contra la guerra.
1917- Como reacción ante los dos millones de soldados rusos muertos en la guerra, las mujeres rusas se declaran en huelga en demanda de “Pan y Paz”. Cuatro días después el Zar abdicó y el gobierno provisional concedió el derecho al voto a las mujeres rusas, un 8 de marzo.
Desde estos primeros años, el Día Internacional por los Derechos de las Mujeres, ha estado llamando la atención sobre la paz y un no a las violencias y a las guerras.
En el siglo XX las Naciones Unidas acogen esta fecha mediante la realización de 4 conferencias mundiales sobre la mujer, llamando la atención sobre la necesidad de reconocer sus derechos sociales, económicos, culturales, sexuales y reproductivos.
101 años atrás, las mujeres de todo el mundo dieron un paso histórico en el camino hacia la igualdad.
Imaginando a las valientes pioneras y como mirarían el mundo de hoy, imagino que tendrían una mezcla de orgullo y una profunda tristeza. Orgullo debido a los avances sin precedentes de los derechos jurídicos de las mujeres, que nos hacen afirmar que el reconocimiento de los derechos humanos de las mujeres es una de las revoluciones sociales más profundas que se haya visto en el mundo.
100 años atrás, solo en dos países las mujeres podían votar.
Un siglo atrás se consideraba la violencia al interior de los hogares como un asunto privado. Hoy la mayoría de países del mundo tienen leyes que penalizan la violencia doméstica, y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas reconocen al empleo de la violencia sexual, como una táctica de guerra deliberada.
Sin embargo, la tristeza profunda de nuestras mujeres pioneras, se daría porque:
- Casi dos de cada tres personas adultas analfabetas, son mujeres.
- Cada 90 segundos, todos los días, una mujer muere durante el embarazo o debido a complicaciones relacionadas con el parto, pese a que tenemos el conocimiento y los recursos técnicos y humanos para garantizar un parto seguro.
- En todo el mundo, las mujeres ganan menos que los hombres por realizar el mismo trabajo.
- Hay desigualdad en el acceso para ellas, a la tierra en la mayoría de los países.
- Las mujeres solo ocupan el 19% de los escaños legislativos y solo 28 mujeres se desempeñan como jefas de Estado.
- En Envigado no hay ni una sola concejala.
La democracia, el desarrollo y la paz, pagan el precio de la discriminación, al no incorporar el talento y potencial de la mitad de la población: las mujeres. No podemos esperar otros 100 años.
“El concepto de democracia solo tendría un significado verdadero y dinámico, cuando las mujeres puedan opinar, intervenir, influir y decidir en condiciones de igualdad, equidad y oportunidad en los destinos y rumbos de la sociedad.
Desde la Secretaría de Equidad de Género saludamos a las mujeres en este día, redoblando el compromiso con la defensa de los derechos adquiridos y la conquista de más espacios que garanticen la justicia y la igualdad para ellas.
Este compromiso está reflejado en el Plan de Desarrollo, en nuestras líneas estratégicas y en el Plan de Acción.
Necesitamos del apoyo de todas las dependencias de la administración municipal para que, de manera conjunta, asumamos la búsqueda de soluciones para las situaciones de injusticia y desigualdad que viven las mujeres en el municipio de Envigado.
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