Para mi nieto TOMÁS.
En el día de tu grado como bachiller, hago memoria de tu paso por mi vida, es el ritual de paso que tú estarás haciendo, cerrando una etapa de tu vida (niñez y adolescencia) y haciendo memoria de amistades, profesores, miedos, tristezas, inseguridades, alegrías, amigos, sueños, risas, complicidades y anécdotas que te marcaron y acompañarán en tu vida.
He tenido la fortuna de ser tu abuela, acompañarte en todas las etapas que vienes viviendo, descubriendo, experimentando, abriendo tu mente, corazón, sensibilidad y alas, para emprender un bello vuelo.
He compartido tus juegos y temores infantiles, tu asombro por el mundo de afuera, tu curiosidad frente al conocimiento, la música que hemos disfrutado plenamente, he leído buena parte de los libros que te correspondían en tu currículum académico, discutimos tareas, fuimos al Planetario, me acompañaste a museos, exposiciones, conciertos, manifestaciones y discutimos de política. Nos hemos llenado de interrogantes frente a la magnitud del universo, viendo las estrellas, indagando en la astronomía y la física, que han sido motivos de discusión contigo.
Por algún motivo, también me he dado cuenta que algo está fallando en tu cuerpo, me ha correspondido desde mi intuición, alertar sobre tus dos enfermedades y estar atenta a buscar soluciones; hemos llorado, interrogado, sufrido y nos hemos ilusionado juntos con las subidas y bajadas que te han correspondido en el camino de la vida.
Agradezco el poder acompañarte, apoyarte en tu camino y descubrimiento de tus talentos, soñar juntos posibles futuros.
Descubrí que los nietos son como los hijos, que se quieren con la sabiduría que dan los años. Gracias por ser mi regalo en la vejez y llenar de motivos de alegría, orgullo y asombro, tu crecimiento como ser humano.
Te amo infinitamente y tú lo sabes.
Tu abuela MARGARITA.
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